Celular

Celular...

En Wammy's House todo era caos, desde hacia 3 días el chico genio conocido como "L"  había regresado después de resolver un importante crimen; todos estaban alrededor suyo, todos lo adoraban, todos querían que el jugara con ellos.

El más interesado era ese rubio intenso de "Mello", no se separaba de el, siempre le hacia preguntas sin sentido, torpes y no dignas del posible heredero del legado de L.

Mientras todos rogaban por la atención del detective, yo me quede en mi cuarto, no por que la cuna me impidiera salir, sino que simplemente no me interesaba ese tal L. Ya lo había visto hace mucho, cuando fue a la guardería del hospital. Ese día fue el primero de mi nueva vida; vi al supuesto genio del otro lado del vidrio, con esa mirada cansada; comiendo un terrón de azúcar con una mano y "sujetando" un celular con la otra. Me dio mucha curiosidad verlo, era tan... tan... no especial, de hecho parecía enfermo; cuando su mirada y la mía se cruzaron, fue como si no hubieran presentado sin ninguna palabra. Desde ese día cada que L viene a Wammy's House, solo pasa por mi cuarto y me mira a los ojos y se retira a la alcoba de Watari.

" ¿POR QUE SIEMPRE TIENES QUE IR A VERLO?" se oía a través de la puerta al inútil de Mello. Junto con el rubio presuntuoso, también se escuchaban más murmullos de niños.

"¿YA SABES HABLAR?" dijo L cerrando la puerta tras el. "MI LÉXICO HA AUMENTADO DESDE LA ULTIMA VEZ QUE VINISTE" conteste mientras jugaba con mi blanco cabello. "EN ESE CASO, TOMA, ES DE MENTIRAS, PARA QUE APRENDAS A USARLO" dijo mientras  me daba un celular como el de el.

Salio de mi cuarto, y nunca lo volví a ver, hasta ese día que nos informaron de su muerte.